El citrato de clomifeno (o simplemente, clomifeno, o clomid), es un poderoso anti estrógeno clasificado como SERM (selective estrogen receptor modulator, por sus siglas en inglés). En varios modos es similar a otro SERM muy popular llamado tamoxifeno (contenido en el medicamento nolvadex). No es un esteroide anabólico, pero es ampliamente utilizado por los consumidores de estos, más que nada para ser usado como parte de la terapia de post-ciclo que viene después de un ciclo de esteroides anabólicos.
Al dar por concluido el ciclo, y suspender el uso de esteroides anabólicos, el cuerpo del hombre se encuentra en un estado de baja producción de testosterona, la gravedad de esto depende en gran medida del tipo de sustancias usadas, el tiempo que fueron suministradas, y de cómo reaccionó la persona (hay casos donde no existe una supresión significativa como puede ocurrir al hacer el uso de sustancias nobles como la oxandrolona). Estar en un estado de baja producción de testosterona no solo no es saludable para la persona, sino que corren el riesgo de ser perdidas las ganancias obtenidas durante el ciclo, y pudieran comenzar a presentarse todos los efectos secundarios relacionados con encontrarse en esta condición.
En la mujer el clomifeno es específicamente usado como tratamiento para la infertilidad. Debido a los andrógenos extras circulando en el cuerpo de la mujer por el uso de esteroides, sus niveles de producción y liberación de hormona luteinizante (LH) y hormona foliculoestimulante (FSH) se ven obstaculizados, en consecuencia, se reducen los niveles séricos de estas dos hormonas, además de los estrógenos y progesterona. Lo anterior, podría llevar a un ciclo menstrual irregular o a una reducción en la fertilidad de la mujer.
El uso de clomifeno en un post-ciclo estimula la glándula pituitaria para liberar más LH y FSH, que en consecuencia ayudarán a recuperar la producción natural de testosterona en el hombre. En el caso de la mujer estas dos hormonas son responsables de la ovulación y, por ende, resulta efectivo en el tratamiento para la infertilidad, en caso de que hayan ocurrido por el uso de esteroides anabólicos.
El clomifeno es uno de los más tolerados SERMs o anti estrógenos que existen, tanto para hombres como para mujeres, sin embargo, puede haber casos muy raros en donde se presenten dolores de cabeza, nausea, o aparición de acné, que más allá de ser ocasionada por el clomid en sí, se debe realmente al alto flujo natural de testosterona que ahora está siendo producida en el cuerpo.
Para asegurar al máximo la recuperación de la producción natural de testosterona en el post-ciclo del hombre lo más recomendable es después de haber suministrado gonadotropina coriónica humana (HCG), utilizar el clomifeno. Su dosis común es de 100mg diarios las primeras dos semanas, seguido por 50mg diarios las siguientes dos semanas, y suspender.
Para las mujeres el clomifeno debe ser usado cuando se presente el sangrado natural de la menstruación (esto debería ocurrir en 2 a 4 semanas máximo después de suspender el uso de anabólicos, en caso de que no ocurra, hay que inducirlo artificialmente con el uso de HCG). El consumo de clomifeno se puede comenzar entre el día 2 o 5 de la menstruación, debe tomarse durante 5 días seguidos en dosis de 50 a 100mg diarios. Lo anterior puede ser repetido en las siguientes dos menstruaciones para así asegurar lo más posible la recuperación de la fertilidad.