La testosterona es una hormona producida naturalmente por el cuerpo humano, es responsable del desarrollo balanceado, el mantenimiento de las características sexuales primarias y secundarias en los hombres (engrosamiento de la voz, ensanchamiento de los hombros, y crecimiento de bello facial y corporal). Es por ello que su uso en las mujeres no es recomendable si no se desea correr el riesgo de obtener estas características. La testosterona también es requerida por el cuerpo humano para la densidad ósea, la libido sexual, distribución de la grasa, y la producción de glóbulos rojos.
El sostenon es una mezcla de 4 tipos de testosteronas en una. La razón de ser de esta combinación, es proporcionar los beneficios de la testosterona rápidamente, así como una liberación prolongada de la misma. La precisa composición del sostenon contenida en Sustalpha 250 es la siguiente:
Testosterona propionato 30mg/ml
Testosterona fenilpropionato 60mg/ml
Testosterona isocaproato 60mg/ml
Testosterona decanoato 100mg/ml
El uso de esta hormona en cantidades mayores a la producida naturalmente da resultados casi permanentes, más fáciles de conservar que con otros esteroides más fuertes como el dianabol (metandienona). Entre lo que se puede obtener están las ganancias en términos de función muscular, cantidad de masa muscular, fuerza, resistencia, y capacidad para manejar entrenamientos intensos.
Las anteriores cualidades son logradas debido a un aumento en el grado de recuperación de los músculos del cuerpo humano. La testosterona posee la capacidad de reducir la hormona cortisol, responsable del acumulamiento de grasa y del catabolismo de los músculos. El aumento en el conteo de glóbulos rojos permite mayor entrada de oxígeno a la sangre, lo que incrementa las capacidades de entrenamiento. Y, por último, hay una más elevada síntesis de proteínas en el cuerpo, por lo que más músculo puede ser construido gracias a esto.
Es el más versátil de todos los esteroides anabólicos. Muchos de los demás esteroides que existen son derivados de la testosterona.
Al momento de utilizar testosterona de forma exógena, el cuerpo disminuye la producción propia para tratar de tener un equilibrio y que no exista tanta testosterona en el cuerpo. De hecho, es por esto mismo que aromatizan a estrógeno algunos esteroides, para mantener nivelada la balanza de andrógenos y estrógenos. Esta disminución en la producción natural de testosterona volverá a la normalidad una vez que se suspenda su uso, sin embargo, es necesario una terapia de post-ciclo para ayudar a regresar rápidamente a la normalidad esta producción, y así no pasar mucho tiempo en un estado de baja testosterona.
Los efectos secundarios de la testosterona se deben principalmente a su conversión en estrógeno por el cuerpo humano. Para evitar los efectos adversos como, retención de líquidos, elevada presión sanguínea, cambios de humor o hasta ginecomastia, es buena idea tomar un anti estrógeno como el tamoxifeno (nolvadex) o arimidex (anastrozol) y de esta manera fácilmente desaparecerán los efectos secundarios de esta naturaleza.
La testosterona no es tan elevadamente androgénica como otros esteroides en los que es más probable la aparición de acné o pérdida de cabello, pero esto está determinado en gran parte por si la persona es propensa o no a padecer estos síntomas, así mismo, pueden reducirse o desaparecer si se ajusta correctamente la dosis en el cuerpo.
Para tratar una deficiencia de testosterona basta con inyectar 250mg una vez cada 10 o 14 días, aunque la desventaja de usar sostenon para terapia de reemplazo de testosterona (TRT), es que los primeros días se genera un pico en la cantidad de testosterona presente en el cuerpo, y posteriormente va disminuyendo. Es preferible en este caso utilizar mejor la testo enantato o cipionato.
Si se desea mantener picos constantes y además niveles duraderos en la cantidad de testosterona circulando en el cuerpo, para así tener efectos anabólicos más fuertes y rápidos que los que se pudiera obtener con testo enantato o cipionato, entonces el sostenon debiera ser inyectado desde 100mg hasta 250mg, de 2 a 3 veces por semana. Suministrarse una sola inyección a la semana que contenga la misma cantidad que todas las 2 o 3 inyecciones semanales juntas, también daría buenos resultados.
Exceder estas dosis podría ser tolerable, pero el riesgo a efectos secundarios aumenta.